El
funcionario dice que llegó a la reunión 10 minutos después de que terminara la
medida. Pero no es todo, también le critican que no hubiera protocolos de
bioseguridad.
Roberto
Celedón, alcalde del municipio de Baranoa en Atlántico, está en el centro de la
polémica por asistir a una fiesta de velitas en medio del toque de queda.
La
celebración se llevó a cabo en el corregimiento de Campeche y videos publicados
en redes sociales muestra que ninguno de los asistentes cumplió con el uso del
tapabocas ni el distanciamiento social.
En
la fiesta privada se presentaban varios artistas. Cabe destacar que durante la
celebración de velitas regía toque de queda en el municipio, hasta las cinco de
la mañana del 8 de diciembre.
Sin
embargo, Celedón respondió a las críticas con un comunicado en el que afirmó
que no infringió el toque de queda porque llegó al sitio cuando la medida ya se
había levantado.
“Luego
de encender las velitas en casa con mi esposa, tal como se aprecia en la
publicación realizada en redes sociales, llegué a eso de las 5:10 a.m. al
corregimiento de Campeche, donde se conmemora la Inmaculada Concepción, y fui
recibido por unos amigos”, señaló.
Agregó
que “el lugar en el que estaba no excedía el máximo de 50 personas”.
Sin
embargo, la situación ha generado polémica teniendo en cuenta la recomendación
del presidente Iván Duque de celebrar esta fecha en casa y con personas del
mismo núcleo familiar.