La
mayoría de ellos pudieron vender su producto a un precio más alto del que se lo
compran los intermediarios, por lo que tuvieron ingresos más altos.
En
los últimos días se está llevando a cabo una campaña de solidaridad con los
paperos de Cundinamarca que en las semanas recientes se han quejado de lo
mucho que se han disminuido sus ingresos desde que se ha aumentado la
importación de papa proveniente de Europa.
Autoridades
del departamento, de Bogotá y varios líderes de opinión han invitado a los
conductores a que se movilicen por las carreteras y les colaboren comprando
bultos de papa en los diferentes peajes en los que ellos están. Por el momento, la
campaña ha sido exitosa y varios de los campesinos han visto ingresos que no se
equiparan con sus ventas habituales.
De
acuerdo con el gobernador de Cundinamarca, Nicolás García, intermediarios les
compran los bultos a los paperos a 15.000 pesos, para revenderlos en las
ciudades a 70.000 pesos. Por eso, la campaña de estos días se propuso
vender los bultos a 40.000 pesos, para que los agricultores reciban una suma de
dinero más justa por el producto de calidad que ofrecen.
El
éxito en las ventas fue confirmado por don José Quintero, un papero que salió a
la carretera este viernes y logró vender 70 bultos. Por esa cantidad, el
campesino habría recibido 1.300.000 pesos en el mercado, pero luego de la
jornada de ayer regresó a su casa con 2.500.000 pesos.
La
iniciativa para ayudar a los paperos se extenderá durante todo este puente
festivo. Son ocho los peajes en Cundinamarca en los que los conductores podrán
encontrar los puestos de venta: Siberia Calle 80, Chusacá, Casa Blanca, Calle
13, Villapinzón, Los Andes, Boquerón y El Roble.