Según reportaron los medios locales, la joven de 14 años identificada como Anastasia, ocultó por nueve meses el embarazo a sus padres, amigos y profesores, pues la adolescente continuó yendo a la escuela durante todo ese tiempo sin levantar sospechas.
La niña habría confesado que tenía mucho miedo de contarle a su familia lo que ocurría, por lo que decidió esconder al bebé apenas nació.
Una oficial regional llamada Nadezhda Boltenko, contó a la prensa que la madre de la menor llamó a una ambulancia tras escuchar a su hija quejarse y gritar de dolor por lo que asumió se trataría de una apendicitis.
En el camino, la joven les contó la verdad. Ellos de inmediato se comunicaron con las autoridades quienes de inmediato se dirigieron hasta la residencia, pero ya era demasiado tarde.
Actualmente, la adolescente se encuentra en estado grave. Un funcionario que investiga el caso lo calificó de "terrible". Por su parte la represéntate del Comité de Investigación de Rusia, Anastasia Kuleshova, informó que los detectives están investigando las circunstancias de la muerte del bebé.
También se conoció que el padre del niño es otro adolescente de 16 años, compañero de clases de Anastasia. Los padres de la joven explicaron que ellos creían que su hija había ganado algo de peso, pero jamás imaginaron que estaba embarazada.