Bebé fue brutalmente golpeado y luego ahogado por su padrastro.


  

La Policía de Boyacá logró esta semana esclarecer el homicidio de un menor de 23 meses de edad, quien en reiteradas ocasiones recibió agresiones físicas del padrastro, que desencadenaron la muerte del pequeño.

En el municipio del Espino, la Policía Nacional en el departamento de Boyacá, a través de los funcionarios de la Seccional de Investigación Criminal SIJIN, hizo efectiva la orden de captura contra un hombre de 37 años de edad, natural de la ciudad de Bogotá, por el delito de homicidio agravado.

El suceso

Se realizó en el barrio Acapulco del municipio de El Espino en Boyacá, lugar hasta el que llegaron los investigadores de la SIJIN para adelantar la captura de esta persona, padrastro del menor de 23 meses, que el día 31 de agosto del presente año, sobre las 7:35 de la noche, ingresó al hospital San José del municipio de El Cocuy, y quien falleció por un supuesto accidente ocurrido al interior de su hogar.

Luego de las actuaciones de policía judicial adelantadas en coordinación con la Fiscalía y con el apoyo de Medicina Legal, se logró establecer que el deceso del menor no fue producto de un accidente, sino un homicidio perpetrado por el padrastro.

Durante aproximadamente un mes, el sujeto venía ejerciendo maltrato infantil a través de golpes (puños), sumergiéndolo en un tanque de agua, entre otras agresiones, causando daño físico y psicológico, que terminó con la muerte del menor cuando este sujeto le propinó un puño en el pecho, de acuerdo al dictamen médico legal que relaciona las diferentes lesiones.

Investigación

La Policía estableció que el fallecimiento del menor no fue producto de una caída jugando con una pelota, como lo había manifestado el hoy capturado, sino que fue ocasionado por las diferentes lesiones producidas durante el mes de convivencia.

El capturado fue dejado a disposición de la Fiscalía y se encuentra a la espera de que le sea definida su situación jurídica