Creció entre las selvas tropicales de Panamá, en medio
de chozas de paja, a pesar de todas esas dificultades salió adelante y ahora
triunfa por el mundo gracias a su enorme tenacidad.
Luis Ángel, que ya es oficialmente
un piloto comercial contó en una entrevista con El Siglo que antes de irse a
ese país y buscar las formas para lograr convertirse en piloto, tuvo que hacer
varios cursos de inglés, luego, sin ninguna garantía, se fue a Norteamérica a
ver si la suerte sonreía a su favor.
Finalmente, este joven que quiere
iniciar su trabajo en alguna aerolínea de su país, confirmó que ese triunfo se
lo dedica a Dios y a su comarca, a la cual pidió priorizar el estudio como la
mejor receta para progresar en distintas áreas de la vida.